Todo el mundo sabe que los mejores adornos de Navidad son aquellos que están hechos a mano, porque siempre se aprovechan todos esos productos en casa y no conseguimos darles uso. Con esta entrada vamos a aprender paso a paso cómo hacer fáciles y caseros adornos de Navidad por muy poco dinero y con muy poco esfuerzo.
Para ello necesitaremos fieltro, algodón, tijeras, aguja e hilo blanco un poco grueso y sobre todo mucho cariño e imaginación. Además los más pequeños de la casa podrán ayudarnos, con lo que hacer estos adornos se convertirá en una actividad familiar.
Con un lápiz trazaremos el contorno de un árbol de navidad sobre la tela de fieltro, haciéndolo tan grande como queramos que sea el adorno y haremos varios contornos en la misma tela. Cuando estén trazados pasaremos a cortarlos minuciosamente para que queden lo más parecido posible.
Una vez recortados podremos hacer algún detalle para que quede mucho más vistoso. Podemos hacer unos pespuntes en diagonal y otro en línea recta para que quede como una pequeña estrella, dándole un original contraste al árbol. Si se quiere algo más trabajado se pueden poner pequeños botones dorados o incluso lentejuelas.
Después coseremos los bordes, sin hacer una puntada demasiado perfecta ni recta como requerirían otras telas, aunque depende de la elección de cada persona. Coseremos todo el contorno excepto la parte inferior del árbol, que es por donde meteremos el algodón para que sirva como relleno. Si no se tiene algodón también vale una esponja cortada en trocitos muy pequeños o incluso porexpán.
Cuando esté relleno se cose la parte inferior para que no se escape y ya solo queda coserle en la copa del árbol un poco de hilo para poder colgarlo del árbol de Navidad o donde se desee. Recordad que la imaginación es vuestra mejor arma y si queréis podéis utilizar oro dorado en caso de que la tela sea de color oscuro o cualquier otro detalle, seguro que os quedará perfecto.